Sunday, February 13, 2005

Tia Ingrid y el cumulunimbus traidor.


Casa la tieta Ingrid, després de la tempesta.. Posted by Hello

Eché un vistazo por la ventana del comedor. Por la parte que dá a la Sierra del Ubach asomaban cumulunimbus negros como el carbón e hinchados como merengues. Daban mal fario, álguien se va a lastimar, pensé. las tormentas de Septiembre son traidoras.
Del fondo del pasillo surgió la voz de tía Ingrid: -Tristany, Tristany,deberías acompañarme a comprar un bote de Cola-cao, se hace tarde y parece que va a llover.
La tía no podía vivir sin su bote de Cola-cao, era su razón de vivir y el combustible que hacía funcionar aquel cuerpo esmirriado y frágil. " Dadme un bote de Cola-cao y moveré el mundo", decía a quien quisiera oirla (y a quien no quisiera también).
Su devoción por el Cola-cao era directamente proporcional a su odio por el Nesquik...
(recuerdo aún, como si fuera ayer, el día que me llamó Luís, el del Super de Casa Montserrat de Matadepera: - Tristany, Tristany, ven deprisa, tía Ingrid a perdido el oremus, la dignidad y hasta la carta de navegar!.
Me calcé los zapatos que corren (los de suelas de goma). En diez minutos me planté en el Super. Abrí la puerta. Docenas de botes de Nesquik esparcidos por el suelo: rebentados, abollados, vilipendiados y vencidos. En medio del estropício sobresalía la figura desafiante y menuda de tía Ingrid, - quien ose avanzar un solo paso no vivirá para contarlo-, decía, al tiempo que amenazaba con la punta del paraguas al bonachón de Luís y a las dependientas del Super que observaban la escena a una distáncia prudencial.
A espaldas de tía Ingrid, las estanterias de Cola-cao y las que otrora habían acogido los botes de Nesquik, lucían en hileras, meticulosamente ordenadas, sendos botes de Cola-cao: un bote, un palmo, un bote, un palmo...
Con la inestimable ayuda del policía municipal, hermano de Luís, convencimos a tía Ingrid que depusiera las armas. Decidimos no remover más la cosa. En la tierra paz y en el cielo gloria.


Punto exacto donde localizamos a tia Ingrid. Posted by Hello

Salímos, pués, a comprar el bote. El cielo se había puesto negro como las entrañas de un lobo. Daba pavor.
Camino de vuelta a casa se oían truenos lejanos. Tía Ingrid trajinaba el bote de Cola-cao de 5kg como quien exhibe una cabeza de antílope cazado en Africa.
De repente un trueno terrorífico hizo temblar cielos y tierra. Una cortina de agua, como nunca habíase visto, se precipitó sobre nuestro, era como si todo el Nilo bajara de las alturas.
El nivel del agua empezó a subir, me encaramé al techo de una cabina de los ciegos. De lejos veía tía Ingrid, flotando sobre su bote de Cola-cao, alejándose Rambla abajo.
No supimos más de ella.
A los dos días, una nave de Salvamento Marítimo detectó un puntito negro flotando entre las olas, a medio camino entre Barcelona e Ibiza. Al acercarse, comprobaron sorprendidos que se trataba de una persona de género femenino, de entre 70 y 80 años, asida a un bote de Cola-cao. Sí, era tía Ingrid.
La notícia de la "resurrección" de tía Ingrid fué muy celebrada en toda la ciudad.
Al cabo de un mes, el Hogar del Jubilado del Centro organizó una fiesta marinera, un "cremat", en homenaje a tía Ingrid.
El momento más emotivo se produjo cuando una coral de habaneras, acompañada de todos los asistentes, empezó a entonar la bonita habanera...


Quan jo tenia pocs anys
el pare em duia a la barca
i em deia: -Quan siguis gran
no et fiïs mai de la calma.
Bufa, ventet de garbí,
vent en popa i mar bonança!
Anirem cap a llevant
fins a la illa d'Eïvissa.
Ai de l'amor!
. -Ai, fill meu, quan siguis gran
no et fiïs mai de la calma,
que després ve un temporal
a l'hora més impensada.
Bufa, ventet de garbí...
La mar semblava un mirall;
la lluna plata semblava:
-Això serà el temporal
d'una nineta encantada.
Bufa, ventet de garbí...
L'arbre n'és un tros de pi,
la barca una post corcada;
els rems en són afegits,
que d'un pam no fan a l'aigua
Bufa, ventet de garbí...

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